Peio, el rayo y el árbol
Autores:
Ana Zabala
Mª Ángeles Zumalde
Estrella Parada
Julián Martínez
Ángela Urteaga
Autores de las ilustraciones:
Blogmaníacos Andrea e Iván, Tania y Romina
Tamara Orozco @tw_tamara
Autores de las ilustraciones:
Blogmaníacos Andrea e Iván, Tania y Romina
Tamara Orozco @tw_tamara
Creación de los blogmaníacos Andrea e Iván |
Ocurre este hecho en el Valle de Leizaran. Era Peio un chaval travieso, listo como el hambre.
Día sí, día no, iba al bosque, y uno de esos días en los que andaba por ahí se desata una tormenta espantosa. Peio, asustado, se refugia bajo un árbol.
- Hola, Peio, ¿cómo por aquí? Todos los días te veo, pero hoy, ¡por fin! parece que tú me ves a mí - a la vez que con sus ramas lo abrazaba.
- ¡Hola! Te veo tan grande, que vengo a protegerme.
- Suelo verte pescar, coger setas, siempre divirtiéndote, sin momento alguno para estar conmigo... y yo siempre solo. - cada vez lo abrazaba más fuerte.
- Por favor... déjame ir...
- ¿Ves esas ortigas, Peio? Pues son niños que, como tú, vinieron a mí solo en caso de necesidad.
- ¿Te extraña estar siempre solo si así te comportas con los que te necesitan?
El árbol, extrañado, abrió sus ramas y aprovechando el momento de flaqueza, Peio logró escaparse.
Obra de la blogmaníaca Tania |
En ese mismo instante, un rayo iluminó el bosque partiendo el árbol y haciendo que las ortigas se convirtieran de nuevo en niños.
Propuesta de la blogmaníaca Romina |
Desde aquel día, todos los años en el valle se acude al árbol quemado para que no se sienta solo y así no se repita la historia.
Autora: Tamara Orozco |