1º curso de Ciencias Humanas
LA LETRA CON SANGRE ENTRA
…pero con dulzura y amor se enseña mejor (revisión actualizada del refrán)
Ya a principios del siglo XVII, en El Quijote, aparece el refrán “la letra con sangre entra”, señalando las dificultades y esfuerzos que son necesarios para aprender: "menester será que el buen Sancho haga alguna disciplina de abrojos, o de las de canelones, que se dejen sentir, porque la letra con sangre entra" (El Quijote, capítulo XXXVI, 2ª parte).
Y la señorita Gloria aplicó el refrán en la escuela de Ondarroa donde yo aprendí a escribir, a principios de los años 50. Tenía yo poco más de siete años.
Imaginad lo difícil que puede ser corregir un texto escrito a lápiz si no se tiene una goma de borrar. Y más complicado aún enderezar unas palabras que se van inclinando, “cayendo” en el cuaderno sin conseguir mantenerlas dentro de la línea prevista. Yo intentaba escribir recto, sin salirme de la raya, pero ¡era superior a mí!, las palabras se iban torciendo y como no tenía borrador, intentaba deshacer lo escrito con la yema de los dedos, con un resultado nefasto: borrones de color gris oscuro sobre los cuales reescribía sin mucha fortuna.
La señorita Gloria (pequeña, más bien esmirriada, mandona y con voz chillona) me llamó para que le enseñara mi cuaderno. Creo que tragué saliva y me acerqué a su mesa muerta de miedo. Cuando vio mi trabajo soltó un grito y me arreó un bofetón en la cara que no he podido olvidar nunca.
Este es el primer recuerdo de mi paso por la escuela. Menos mal que mis padres tuvieron la idea de venir a vivir a Donostia y aquí las cosas cambiaron. Ahora no es más que una anécdota que disfruto contando a mi nieta y sus compañeros del parque cuando surge la ocasión. Porque, afortunadamente para los niños, alguien debió revisar el viejo refrán para añadirle “…pero con dulzura y amor se enseña mejor”.
¡Que en gloria esté la tal Señorita Gloria!
Txarito de pequeña |
Imaginad si todas las maestras fueran como la Señorita Gloria... ¡¡Mejor no!!
ResponderEliminar